lunes, 6 de mayo de 2013

El Maestro y su oficio


EL MAESTRO Y SU OFICIO



Alonso Takahashi

El oficio del maestro es enseñar.
Enseñar es señalar, indicar la ruta.
Hay que dar a los alumnos
la oportunidad de transitar su propio camino
y encontrar las cosas por sí mismos.
Cada vez que entregamos a un alumno
un conocimiento ya elaborado y decantado,
le estamos quitando la oportunidad de descubirlo.
Lo importante es enseñar a a prender.
En ello entra en juego la memoria y también el olvido.
A menudo el maestro debe olvidar lo que sabe
para que el alumno lo descubra.
Para Heidegger enseñar es más difícil que aprender
porque enseñar significa dejar aprender.
Más aún, el verdadero maestro
no deja aprender “nada más que el aprender”
por esto también su obrar produce a menudo
la impresión de que propiamente no se aprende nada de él,
si por “aprender” se entiende
nada más que la obtención de conocimientos útiles.
Lo esencial en el aprendizaje no es el producto sino el proceso.
Lo mismo ocurre con la creación de conocimiento.
Leibniz decía que las fuentes de la invención
son más interesantes que las invenciones mismas.
Las ideas deben nacer en la mente del alumno, sostenía Sócrates.
El aprendizaje no debe ser pasivo.

Tomado de: El Juego y el Arte de Ser…humano
Autora: Marta Inés Tirado Gallego
Universidad de Antioquia
1998